¿QUÉ TAN PREOCUPANTE ES EL ENDEUDAMIENTO EXTERNO DE NICARAGUA?
Por: José Márquez Ceas, Economista y MBA
El informe del primer trimestre 2017
del BCN señala que la deuda externa total asciende a 10,943 millones de
dólares, de los cuales 5,866 millones es deuda privada y 5,077 millones deuda pública. La
razón Deuda Externa Total a PIB es 78.7% y la razón Deuda Externa Total a
Exportaciones es 180.2%
Comparando con Honduras, vemos que ese
país tiene una relación deuda externa total
a PIB de 50.6%, mientras que en Nicaragua es 78.7%. La deuda externa pública a PIB es 42.2% en Honduras, y 36.5% en Nicaragua.
Pero, la relación deuda externa privada a
PIB de Honduras es 8.4%, mientras en Nicaragua es 42.3%. Resulta evidente que
el endeudamiento externo total y el endeudamiento externo privado de Honduras es
mucho más holgado que el de Nicaragua.
Una situación preocupante es la deuda
externa de Alba de Nicaragua SA (ALBANISA), con Venezuela, por el suministro
petrolero en el marco del acuerdo de PETROCARIBE, que es un acuerdo de estado a
estado. Albanisa está conformada por dos socios: PDVSA de Venezuela (51%) y
PETRONIC de Nicaragua (49%).
La deuda externa privada originada en
la cooperación venezolana durante 8 años totalizó 3,500.8 millones dólares hasta
2015, según el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI). Estos
fondos los manejaba la Cooperativa Caja Rural Nacional (CARUNA), la cual se
desligó recientemente del esquema al trasladar a Albanisa todos los activos y
pasivos relacionados con la administración de esos recursos.
Por publicaciones de la Asamblea
Nacional de Venezuela y medios locales de ese país, conocemos que PDVSA vendió
deudas derivadas del acuerdo energético al Banco Central de Venezuela,
incluyendo la deuda de Albanisa. Los traslados de activos y pasivos de Caruna a
Albanisa y la venta de deuda de PDVSA al Banco Central de Venezuela, buscan que
Albanisa quede como la única responsable legal del pago de dicha deuda, lo cual
aumenta el riesgo de que ese pasivo finalmente se registre como una deuda pública externa de Nicaragua, elevando
su nivel y empeorando los indicadores de sostenibilidad de la deuda externa.
El mismo FMI señaló que Nicaragua enfrenta
un riesgo de sobreendeudamiento general dada la magnitud de la deuda externa
privada, la naturaleza cuasi-fiscal de alguna de esta deuda, y la probabilidad
de que algunos proyectos actualmente financiados con recursos venezolanos
terminen absorbidos por el presupuesto nicaragüense.
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